El 24 de abril se cumple 7 años desde que sucedió el terrible accidente en el Edificio Rana Plaza en Dhacca Bangladesh donde murieron 1138 personas que trabajaban confeccionando ropa para la industria de la moda rápida.

Es por ello que este mes en Canarias Nature vamos a publicar varios post relacionados con la moda sostenible. Si este tema te interesa te animo a suscribirte y a seguir nuestras redes sociales para que no te pierdas nada.

Mira a tu alrededor y piensa en la cantidad de ropa que has consumido hasta ahora en tu vida. ¿Alguna vez te has preguntado donde ha ido a parar todo esa ropa que fue tuya pero que ya no está en tu armario?

Comprar, usar y tirar. Así es como funciona la industria de la moda en la actualidad. Por eso se ha convertido en la segunda industria mas contaminante del planeta. Y nosotros formamos parte de ese desastre.

Por si aún no te queda claro cuales son los beneficios de pasarte a la moda slow, te los resumo rápidamente.

Por el medio ambiente: 

Cada año se consumen alrededor de 70 millones de toneladas de ropa. ¿que supone eso para el medio ambiente?

El impacto ambiental de la moda rápida o fast fashion se ve en el gasto desmesurado de agua (para la producción de un kilo de algodón se necesitan alrededor de 2,700 litros de agua y aproximadamente entre 9 y 11 mil para un par de jeans). La contaminación de ríos es brutal (dicen que los ríos en china son del color de tendencia), el uso de productos químicos y tintes tóxicos hacen que un recurso tan limitado como el agua quede totalmente contaminado.

Pero no solo en la fase de producción dañamos el medio ambiente, en nuestros hogares cuando lavamos la ropa con detergentes convencionales y prendas realizadas con poliester hace que tanto productos tóxicos como los microplásticos lleguen a nuestros océanos.

Con que seas un poco observador tienes suficiente para darte cuenta del gran problema que estamos viviendo. El planeta nos está enviando señales. Las emisiones de gases de efecto invernadero aumentan, se comienzan a registrar temperaturas altas nunca antes vistas, el nivel de mar aumenta al igual que su temperatura. Estamos viviendo fenómenos climáticos adversos nunca antes visto.

Por tu salud:

Muchos tejidos, tintes y otros productos que se utilizan para la confección de la moda rápida y barata son muy tóxicos para la salud. Cuando descubrí que mucha ropa que tenía en el armario era directamente plástico me horroricé. (puedes comprobar tus etiquetas, lo encontrarás como poliéster). El poliéster representa alrededor del 60% de la producción mundial de fibra.

Nos perjudica a nivel tópico (sobre la piel) pero también a nivel alimenticio. Todo lo que termina en océanos y ríos es ingerido por peces y demás que finalmente nosotros también comeremos.

Por dignidad:

Explotación laboral, condiciones indignas para vivir, sueldos de risa, horarios de escándalo. Condiciones horribles de trabajo, de salud que no se le puede desear a nadie. Eso es lo que viven las personas (en su mayoría mujeres) que hacen nuestra ropa. No quiero que te sientas culpable con esto, porque al final nosotros también somos víctimas, dicen que detrás de una camiseta de 5 euros hay dos víctimas el que la hace y el que la compra.

Por tu bolsillo:

Puede parecer hiper barata la ropa de la moda rápida pero esta forma de usarla y tirarla sale caro, muy caro. Al final para ser felices y vivir tranquilos no nos hace falta tener 50 camisetas, 20 pantalones y 15 chaquetas…. dicen que menos es más y en este caso no es la excepción. ¡Ahorraras dinero!.

Por tu estilo:

Al comprar moda slow que puede ser más cara, al final definirás mejor tu estilo, ya que tendrás que elegir cada pieza con cabeza. También cuando compramos ropa de segundamano o vintage ya que son prendas más seleccionadas y únicas.

Sé que no es fácil comprar ropa de confeccionada con filosofía slow, ni encontrar tiendas de segundamano o vintage por eso pronto publicaremos un directorio donde podrás localizar muchas en Canarias.

Así que quédate por aquí muy atento y síguenos en las redes sociales para que no te pierdas nada.

En resumen, pasarte a la moda slow. No solo es comprar ropa sostenible sino comprar menos. Así cuidas del planeta, de tu salud, de tu bolsillo y tu estilo.